Las células madre de tejido de cordón umbilical curan la visión de Vladomir

 

Las células madre de tejido de cordón umbilical curan la visión de Vladomir

 

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En 2008 Vladomir sufrió una encefalopatía hipóxico-isquémica (EHI) al nacer. Al cumplir un año, se le diagnosticó atrofia parcial del nervio óptico en ambos ojos, y además tuvo convulsiones pequeñas, así como problemas de coordinación y motricidad fina. El veredicto de los médicos fue que no se podía hacer nada, el niño es ciego y nunca podrá ver ni controlar su cuerpo debido a un daño cerebral causado por un trauma durante el parto. Su madre 10 años después de su nacimiento y haber probado mil y una cosas, decidió criopreservar las células madre de la sangre y del tejido del cordón umbilical de su hijo menor.

La encefalopatía hipóxico-isquémica ocurre cuando un bebé no tiene suficiente oxígeno al nacer, y posteriormente se les diagnostica parálisis cerebral. La incidencia de la EHI varía entre 1,5 y 10 por 1000 nacimientos, dependiendo fundamentalmente de la calidad de la atención sanitaria del país donde se dé a luz.

En mayo de 2019, su madre dio a luz a un bebé sano. Su sangre y tejido de cordón umbilical fueron almacenados en un banco de células madre y pudieron observar que las células madre eran compatibles con su hermano Vladomir.

Resultados

El seguimiento médico 12 meses después del inicio del tratamiento mostró una mejoría significativa en el electroencefalograma (EEG) basal del cerebro de Vladimir, que mostró signos de actividad epiléptica, principalmente en los lóbulos occipitales. Tiene reflejos tendinosos debilitados e hiperreflexia en las extremidades. Sin embargo, un año después del tratamiento inicial, no hubo signos de convulsiones en el EEG. Se mejoran las habilidades motoras finas y la coordinación. Vladimir ahora participa activamente en deportes, jugando fútbol, ​​lucha libre y ciclismo.

Pero la mejora más notable, casi milagrosa, fue en la visión de Vladimir. Antes del tratamiento, la visión binocular de Vladimir era de 0,02. Después del tratamiento, la agudeza visual del ojo izquierdo mejoró a 0,15 y la del ojo derecho mejoró a 0,20. Estas medidas se realizan en la escala decimal de agudeza visual; en la escala de Snellen utilizada en los Estados Unidos, la agudeza visual de 0,15 y 0,20 es igual a 20/133 y 20/100, respectivamente.

Su madre confirma: “Vladomyr ha comenzado a entrenar, cruzando la calle y no temo que lo atropelle un automóvil. Monta en bicicleta y scooter solo, se mueve por el vecindario. Recientemente subió a Hoverla (la montaña más alta de los Cárpatos), y hace dos años ni siquiera podía imaginar que iría a algún lugar solo. El niño no vio la luna en el cielo, ¡pero ahora ve el avión volando y puede decir su color! Me da escalofrios…"

Conclusiones

Las únicas modalidades terapéuticas que han demostrado beneficiar a los niños con EHI son la hipotermia terapéutica (enfriamiento), si se aplica inmediatamente después del nacimiento, o la terapia celular, que también parece ser más beneficiosa si se administra antes de la lesión. Las terapias con células madre para la EHI se han estudiado en al menos 19 estudios preclínicos con animales y se han lanzado más de una docena de ensayos clínicos en humanos de terapia celular para la EHI 3-7 . El mayor cuerpo de evidencia proviene de estudios de terapia celular para EHI con células madre mononucleares de sangre de cordón umbilical (CB-MNC) o células madre estromales mesenquimales de tejido de cordón umbilical (UC-MSC).

Sin embargo en el caso de Vladomir la terapia con células madre se admimistró 10 años despúes de la lesión y los resultados han sido positivos. El caso de Vladimir es importante porque ha obtenido importantes beneficios de la terapia con células madre, a pesar de ser un adolescente en el momento del tratamiento. La mayoría de los ensayos clínicos de HIE y parálisis cerebral tienen como objetivo el tratamiento con niños pequeños. Este caso demuestra la seguridad y eficacia de la terapia con células madre para niños diagnosticados con EHI y acompañada de atrofia óptica.

 

Fuente: 

https://parentsguidecordblood.org/en/news/vladomirs-story-vision-restored-umbilical-cord-tissue-msc