El Grupo FamiCord libera otra muestra y un niño sale del estado vegetativo tras una infusión de su propia sangre del cordón umbilical

En esta conmovedora historia de éxito del Grupo FamiCord, presenciamos la asombrosa recuperación de un niño que había caído en un estado vegetativo después de sufrir un paro cardíaco prolongado. La esperanza se reavivó cuando se le administró una infusión de su propia sangre del cordón umbilical almacenada en uno de los bancos del Grupo FamiCord.

Este niño en un principio gozaba de buena salud, pero fue ingresado en el hospital debido a vómitos, revelando un grave problema: una porción de su intestino se había torsionado, provocando una obstrucción intestinal. Este incidente desencadenó una infección masiva que finalmente lo condujo a un paro cardíaco que duró más de 25 minutos antes de que se restableciera su pulso. A pesar de sobrevivir al paro cardíaco, los médicos le diagnosticaron en estado vegetativo persistente, con daños cerebrales graves evidenciados en resonancias magnéticas. Los pronósticos médicos eran desalentadores, llegando a considerar el caso como casi sin esperanzas. Los niños en esta situación, en el mejor de los casos, solo experimentan una mínima conciencia de su entorno, incluso después de cuatro años de seguimiento.

Por ello, los padres se pusieron en contacto con el banco privado donde habían almacenado la sangre del cordón umbilical de su hijo. Fue entonces cuando se decidió liberar la muestra de sangre del cordón almacenada para que el niño recibiera una infusión, la cual tuvo lugar nueve semanas después del paro cardíaco.

En tan solo una semana después de la infusión, el niño comenzó a responder a estímulos acústicos, y en dos meses, fue dado de alta del centro de rehabilitación con una mejoría notable en su visión. A los cinco meses, su actividad cerebral volvió a la normalidad. Un año después de la infusión, se observaron mejoras significativas en el control motor fino de las manos, la interacción social y la cognición. Aunque aún tenía debilidad muscular, especialmente en las piernas.

Al finalizar el seguimiento de 40 meses, el niño era capaz de comer de forma independiente, sus habilidades motoras finas habían mejorado tanto que podía manejar un automóvil con control remoto y se ponía de pie y caminaba por sí mismo con la ayuda de un andador.

En resumen, esta neuro-regeneración funcional es difícil de explicar únicamente por medio de la intensa rehabilitación activa, lo que sugiere que el trasplante autólogo de sangre del cordón umbilical puede ser un tratamiento adicional y causal para la parálisis cerebral pediátrica posterior a un daño cerebral.

Este relato destaca la importancia de almacenar la sangre del cordón umbilical de su recién nacido como una medida sencilla y rápida para salvaguardar la salud futura de su bebé en caso de acontecimientos inesperados, brindando tranquilidad a los padres.

Fuentes: 

https://www.ncbi.nlm.nih.gov/pmc/articles/PMC3671311/

https://parentsguidecordblood.org/en/news/cord-blood-rescue-after-cardiac-arrest